DANIEL CARPIO MACCIOTI
El nadador más exitoso del Perú que se inició en Mollendo

Daniel "Carpayo" es uno de los hijos adoptivos de la ciudad de Mollendo que tuvo éxito en el deporte de la natación, convirtiéndose en una leyenda para la historia del Perú.
Daniel Eulogio Carpio Maccioti, conocido como "carpayo", nace en la ciudad de Sicuani-Cusco el 11 de Marzo de 1910, nació en una familia muy pobre económicamente por lo que su familia tuvo que trasladarse al Puerto de Mollendo "por fuerza y por hambre" - como confesó a la legendaria nadadora e historiadora española Monserrat Tresserras Dou - aprendió a nadar a los 5 años en la poza de La Aguadita del puerto de Mollendo, donde empezó a ganarse la vida limpiando barcos y le pagaban con pescados.
Carpayo era alto moreno y dotado de extraordinaria vitalidad y a la edad de 11 años su familia se traslada al Puerto del Callao, en donde al introvertido niño lo enviaban del colegio a buscar frutas al puerto. Es cuando Chucuito fue testigo de las prácticas del Tritón Carpayo, allí nadaba hasta los barcos sin pensar en la distancia, lo que más le interesaba era regresar con las alforjas llenas de frutas, reveló en una entrevista.
La aparición del Old Boys permitió que su talento tuviera donde exhibirse. Además, comía y dormía en el club, y al estar a orillas del puerto podía nadar a tiempo completo. Su primera competencia fue a los doce años. "Desde entonces, con disciplina y esfuerzo, su carrera fue imparable. (...) En su club lo bautizaron para siempre con el sobrenombre de 'Carpayo'", indica Tresserras.
A pesar de su profundo amor por el Perú, se embarcó rumbo a Chile el 28 de julio de 1932 en busca de nuevos horizontes. Llegó a Valparaíso con quince soles en el bolsillo, pero cargado de sueños de gloria. Quería destacar internacionalmente.
Su primer gran triunfo llegaría en 1933, cuando batió el récord sudamericano de doscientos metros estilo espalda con un tiempo de 2 minutos 50 segundos. Después de los Juegos Olímpicos del 36, «representó al Perú en el Sudamericano de 1937 y un año después se hizo cargo del seleccionado de waterpolo, pero los éxitos no lo acompañaron. Ya con 29 años y sin progresos económicos, tomó la decisión de marcharse definitivamente a Argentina», señala . Ahí fue instructor en clubes de la talla de River Plate, «hasta que el famoso periodista Ricardo Lorenzo Rodríguez ‘Borocotó’, de la revista El Gráfico, lo sacó de la pileta. ‘De no haberse cruzado en mi vida, no hubiera pasado de ser un buen nadador de piscina y todos mis logros no existirían'», publicó «El Peruano».

«Daniel Carpio realizó su última competición en piscina en el año 1941. Se proclamó campeón argentino en 200 metros espalda. Así terminaba un brillantísimo capítulo de su vida deportiva, para iniciar otro no menos importante: la larga distancia», viraje en el que influyó el «inolvidable Pedro Candiotti (…), una figura mítica en la natación sudamericana», quien consiguió unir a nado Rosario y Buenos Aires, consiguiéndolo en 75 horas y 18 minutos, es decir, más de tres días a nado sin ser vencido por el sueño. «El ejemplo de Candiotti le hizo soñar con una hazaña que muy pocas personas habían conseguido: el cruce del Río de la Plata», relata Tresserras.
Nadó los sesenta kilómetros de recorrido en tres ocasiones, en 1945, 1977 y 1982. Su primera proeza en Argentina, uniendo Colonia, en Uruguay, con Buenos Aires, dio la vuelta al mundo: cruzó el inmenso trecho en 22 horas y 52 minutos.
«Para tal fin se preparó concienzudamente alternando la piscina con el río. Acomodó su estilo y su mente para resistir muchas horas en el agua. (…) Había triunfado plenamente pero, como todo nadador de larga distancia, le faltaba algo más: el Canal de la Mancha (…)», expone Tresserras.
«Acompañado por su entrenador Carlos Yelmini y con el apoyo económico de la Comisión Nacional de Deportes del Perú, el 8 de julio de 1947 emprendió viaje hacia Inglaterra donde el 4 y 5 de setiembre consiguió cruzar el Canal con un tiempo de 14 horas y 46 minutos. (…) En la República del Perú se le recibió como héroe nacional (…). Carlos Yelmini le aconsejó que no dejara el deporte y le propuso cruzar a nado el estrecho de Gibraltar, que solamente había sido vencido por una persona: nada menos que por la famosa inglesa Mercedes Gleitze, que lo había cruzado hacía veinte años», cuenta Tresserras. Lo consiguió en 9 horas 20 minutos.
El gran vencedor del estrecho en 1948 no se durmió sobre sus laureles. Entre otras pruebas, cruzó de nuevo el río de la Plata, tomó parte en la Maratón Internacional del Canal de la Mancha que en el año 1951 organizó el periódico londinense «Daily Mail», clasificándose en el onceavo lugar, y en el año 1977, como si el tiempo no transcurriera para él, se presentó de nuevo en Tarifa con el proyecto de cruzar de nuevo el Estrecho. Tenía 67 años.
Su potencia física entraba en declinación. A pesar de ello, siguió participando en grandes faenas en mar abierto en Europa y América. De hecho, cruzó de nuevo el río de la Plata en 1982. En 1987, tras varios intentos fallidos, consigue cruzar el estrecho por tercera vez.

Intentó una última hazaña el 19 de julio de 1993, «con 83 años, cubierto por una capa de grasa para protegerse del frío, Daniel inició su cuarto intento. (…) La travesía se desarrolla sin dificultad pero un fuerte calambre abdominal le obligó a suspender la prueba a las 12:50. (…) Podía haber sido y no fue (…) Daniel Carpio Maccioti, nadador, peruano, argentino y también un poco nuestro», sostiene una emocionada Tresseras.
En 1995 volvió por última vez al Perú para ser homenajeado por el IPD y la Municipalidad del Callao, que le entregó la medalla de la ciudad y un diploma de honor. «Mi nombre es Daniel Carpio, mi otro nombre es ‘Carpayo’. Estoy por última vez en mi país. Ya el cartel de mi vida está terminando», declaró en aquella oportunidad al diario «ABC», algo decepcionado por el paso del tiempo.
Fue uno de los nadadores que fundaron la ruta que muchos aficionados tienen entre sus favoritas hoy en día: unir los siete kilómetros de la isla San Lorenzo hacia La Punta. Lo que muchos especialistas consideran un reto, para ‘Carpayo’ era un mero entrenamiento, cuestión de esparcimiento. En 1975 unió por última vez San Lorenzo con La Punta como una exhibición. La «ruta de Olaya», de Chorrillos al Callao, tampoco significaba un reto para Carpio. Si debe existir un ‘Aquaman Peruano’, su nombre es Daniel Carpio Maccioti, simplemente ‘Carpayo’.
Regresó por última vez a Perú en octubre del 2006 con ocasión del reconocimiento que le brindó la Universidad Alas Peruanas, distinguiéndolo como Doctor Honoris Causa, y presentando el libro en su honor, Daniel Carpio: El Último Gigante, escrito por el periodista Manuel Paz Aráoz.
Falleció en Buenos Aires, Argentina el 19 de agosto del 2009 a los 99 años de edad.
Enciclopedia General del Callao Digital - https://www.gob.pe/institucion/regioncallao/informes-publicaciones/2546081-enciclopedia-general-del-callao-digital